PREDICCIÓN MAYA PARA EL 2012

La primera predicción, habla de la última etapa de los miedos que estamos viviendo con respecto al año 2012. Los Mayas dicen que nuestra miseria, odio, devastación, esclavitud y materialismo, terminará el viernes, 21 de diciembre, del año 2012. Que ese día, la humanidad deberá escoger entre, desaparecer como especie pensante, que amenaza con destruir el planeta, o evolucionar hacia la integración armónica con todo el universo, comprendiendo que todo está vivo y consciente. Que somos parte de ese todo, y que podemos existir unidos, en una Nueva Era de luz, de paz, amor, libertad y respeto, con la esencia de la naturaleza y en la inmensidad del Universo.
La segunda profecía expresa que la energía que se toma del centro de la galaxia se ampliará y acelerará la vibración, el palpitar de todo el universo, para transferirlo a una mayor perfección, el cual producirá cambios físicos en el sol, en la tierra y cambios psicológicos en el hombre, tanto en la manera como piensa, actúa y. Se transformarán las relaciones y la manera de comunicarse, los sistemas económicos, sociales de orden y justicia. Cambiarán las creencias religiosas y los valores aceptados. El hombre se enfrentará a sus miedos, a sus angustias, a lo que lo hace sufrir, a lo que no lo deja ser feliz, para resolverlo, sanarlo y poder así balancearse con el planeta y con todo el universo.
La tercera predicción Maya nos dice que el dinero dejará de ser usado como medio de intercambio, lo cual ya ocurre en algunos lugares. Según los mayas surgiría un camino espiritual, una época de luz común para toda la humanidad.
A partir del 2012 todo tendrá precio, hasta lo que Dios nos ha dado: La naturaleza. Nada será dado y absolutamente todo será vendido, hasta el hombre por necesidad comerciará su cuerpo, nada será sagrado, ni su vida ni su alma; se disputarán sus despojos y su sangre como si se tratara de una carroña.
Las predicciones hídricas para lo que resta de año no son nada satisfactorias, pues se estima que en el próximo mes de octubre habrá una ola invernal mayor a la que estamos presenciando.
¿CÓMO CONECTARSE CON SU DESTINO?
Hacer silencio y conectarse con el Yo más profundo.
El silencio es un puente que nos conecta con nuestra esencia o naturaleza original, la cual permite la lectura clara de nuestro destino. Tener una rutina espiritual que permita que las buenas energías fluyan de manera natural. Pensar siempre en Dios, en el Ser Supremo, o en aquel que nos ayuda desde un nivel elevado. Él conoce nuestras elecciones y no juzga, sólo nos apoya en nuestras decisiones.
“COSECHARÁS LO QUE SIEMBRES”
Bajo este lema funciona el concepto destino en las tradiciones orientales, donde no se habla de destino sino de karma. Karma es una palabra sánscrita que significa “acción”. Originalmente se empleó en el contexto de la filosofía Vedanta de la India. Desde allí pasó al Budismo y luego al Taoísmo.
El concepto fundamental es que si una persona obra mal, su alma sufrirá las consecuencias de esta acción. Si obra bien, gozará. El gozo que se cosecha no es la bonanza del dinero, sino la auténtica felicidad y la paz espiritual. Según el Karma, somos arquitectos de nuestro propio destino. El destino lo hacemos día a día.